Conocí a sami, el tren está parado.
Me ve cara conocida, yo también y demasiado!
Todos sus rasgos me resultan familiares, su sonrisa, expresiones.
Sin embargo ninguna recuerda ni conoce alguien con el nombre de la otra.
Me cuenta muchas cosas, habla y se ríe.
Es linda, trasparente, me cuenta una intensa historia de amor.
Le hablo, le cuento de mi.
Le cuento un cuento de terror y reímos como locas.
Me pregunta que escribo cuando escribo, le digo que lo que me sale.
Saco mi cuaderno, me pide si puede leerlo, se lo leo.
Le gusta! Le encanta, sonríe... y me dice que es muy lindo,
me felicita por esa capacidad.
Le digo que cualquiera podría,
que cualquiera puede escribir.
Le cuento como empecé a escribir, la impulso a que lo intente.
Hace chistes sobre ella y reímos, es muy alegre.
Me gusta su mirada.
Me confiesa que de chiquita escribía,
emociones, sentimientos.
Que ya no puede.
- Aunque creo que mucha cosas de chiquita van a volverme - me dice
- Si vos queres y lo dejas así será.. y es que nunca se fueron - le digo.
Me mira.
- Tal vez nos conocemos de otra vida - me dice
Le sonrío, reímos.
- Dormimos un poco? - me dice
Se recuesta en mi hombro y deja blandito mi corazón.
Viajaremos juntas algo más.
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